El Camelbak Nano es el sistema ideal para entrenar muchos kilómetros con calor y bien hidratados. Es un chaleco muy ligero (150 gramos) y transpirable que equipa dos botellas de medio litro de fácil acceso junto a un par de bolsillos laterales. Está disponible en tres tallas diferentes y dos colores distintos. Una de sus mejores características es su ajuste en carrera, incluso por montaña, que impide que moleste o se mueva a ritmos altos de carrera. Se puede comprar por 70€ en Wiggle.
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El nuevo CamelBak 2012 Delaney Fit es un cinturón de hidratación muy cómodo que permite transportar la botella de 0,71 litros que se incluye así como geles o llaves gracias al bolsillo que incorpora. Lo interesante del producto es la amplia banda que se apoya en la parte trasera de la cintura y que asegura que no se mueve mientras corremos. Para lo que no sepan como se llevan estos chismes, recomiendo este vídeo. Cuesta 27 € en Wiggle.
La nueva Camelbak 2012 Charm es una pequeña mochila de hidratación para correr con ella y diseñada especialmente para chicas: es ligeramente más pequeña y más proporcionada a la espalda (generalmente más menuda) de la mujer. Es ergonómica, antifricción, con capacidad para un litro y medio y con toda la tecnología de la marca para impedir que gotee el surtidor o que quede líquido en el depósito sin que se pueda beber. Es una buena opción para entrenar en circuitos largos y con calor. Cuesta 35 € en Amazon.
Las Tabletas Limpiadoras CamelBak se utilizan para mantener limpios el depósito y los tubos de nuestra mochila de hidratación. Primero de todo se tiene que limpiar el depósito por dentro (lo que se pueda) con jabón y un cepillo, después se enjagua para sacar completamente toda la espuma y se rellena con agua del grifo sin que quede hasta arriba; se añade una tableta (una por litro de agua) y se agita fuertemente durante 2 o 3 minutos hasta que se haya disuelto del todo. Finalmente lo dejamos 5 minutos, sacamos el agua, enjaguamos y listo: libre de bacterias, malos olores y sabores raros. La caja de 8 tabletas cuesta 12 € en Wiggle.
El nuevo CamelBak RaceBak es, para resumirlo rápido, una camiseta sin mangas para correr que incorpora un depósito de 2,1 litros distribuidos en la espalda para permitir una hidratación óptima en carrera sin tener que llevar una mochila. La principal ventaja es que es muy cómoda y ergonómica pero intuyo que debe ser un poco agobiante correr con el agua moviéndose por tu espalda por no hablar de lo rápido que se debe calentar. Si alguien la ha probado que cuente algo. Cuesta 88 € en Wiggle.
El Camelbak Camelclip está pensado para corredores que utilicen mochilas de hidratación y tengan problemas con la sujeción de la boquilla. Si bien la mayoría de mochilas con depósito de agua ya disponen de sistemas para mantener el surtidor cerca de nuestra boca, es común que con el tiempo se rompan los velcros o botones que llevan y la manguerita se nos quede colgando. Con la pinza del Camelclip podemos sujetar nuevamente el tubo al tirante de la mochila. También sirve para los que tienen el cuello muy largo y no hay forma de que les llegue la boquilla con los sistemas convencionales. Cuesta 6 € en Wiggle.
La botella Camelbak Performance & Run Strap está diseñada para los corredores que llevan el agua en la mano en vez de colgando por alguna parte del cuerpo. Tiene una capacidad de 650 ml y gracias a su banda de neopreno es muy fácil de llevar y por supuesto de utilizar. Un detalle interesante es el pequeño bolsillo que incorpora y que nos servirá para llevar las llaves. Una de las ventajas principales de Camelbak frente a otras marcas es que la botella es antigoteo y dificilmente te chorreará el líquido por la cara. Se puede comprar por 16 € en Trekkinn.
El nuevo modelo de la Camelbak Hydrobak de 1,5 litros contínua fiel a sus principios y en un mínimo espacio y peso consigue meter un depósito de litro y medio y un par de bolsillos para llevar geles, barritas y llaves. Lo que más me gusta de este modelo clásico es que al fin y al cabo cuando sales a correr en montaña o en ciudad con mucho calor, lo único que interesa es que la bebida se pueda llevar sin molestarnos, sin que se mueva y que pese lo mínimo y en eso, Camelbak lo consigue sin complicarse la vida. Incorpora, además, indicadores fosforescentes en la parte delantera y trasera de la mochila. Se puede comprar por 31 euros en Wiggle.
Como alternativa al clásico Camelbak de mochila para hidratarse, existe el Flashflo que se lleva en la cintura. Aunque no lo parezca, es muy cómodo porque está diseñado de forma anatómica con lo que ni se mueve ni molesta en exceso. Pensado para tiradas de 2 a 3 horas, dispone de un par de bolsillos para poner geles, barras energéticas o algún reproductor de música.Cuesta unos 50 euros en Wiggle UK.
Uno de los problemas habituales en los CamelBaks o bolsas de hidratación es la limpieza. Resulta realmente costoso poder limpiar los dispositivos de hidratación de forma adecuada e higiénica. Para solucionar este problema se puede utilizar la solución que proponemos con un precio de sólo 15 euros. Se puede comprar en Lanson Running.