Un buen sistema para ahuyentar perros cuando corremos y evitar que se nos acerquen (y muerdan) son los dispositivos emisores de ultrasonidos que sólo pueden ser oídos por los animales. En este caso, el Dog Dazer II es un poco más caro que otros modelos pero también es más eficaz al tener un radio de acción mayor. Cuesta 35 € en Amazon.
Le estado echando un vistazo pero parece mu grande 11,5cm de largo me parece muy incomodo de llevar encima mientras corres. ¿Alguien lo tiene?
¿No hay un auyentador para poner en la Moncloa?. Es más que nada por probar si funciona allí …
vya craks ajajaj pero a mi son los perros de echo , hay un buen camino de tierra que no voi por el, pq hay perros sueltos, y la verdad que para no correr solo por asfalto , voi a un campo de futbol a dar vueltas, no sse cmo aún no akabe loco del todo , pq corro en el campo sobre cuarenta minutos..para mi es bastante dando vuelta y vuelta campofrío ajja, y ahora hay una casa pegada a la carretera que me sale un perro, y no es la primera vez que chupo un susto y me voi hacia dentro del carril, para que venga un coche y me lleve, pero el perro no tendría culpa ninguna pq esta en su terreno, que es a nada del arcén entonces a joderse y cambiar de carril.. con el peligro que conlleva, que no es la primera vez que llevo algun susto, y despues en otro lado igual me salen los perros y me tengo que parar…seguramente compre algo parecido aver si funciona saludos
Muy bueno H. No sabes lo que me he reído leyendote, hacia tiempo que no se saltaban las lagrimas de esa manera. A mi me pasa casi todos los días, pero en mi caso son viejas. Un abrazo para todos los viejitos.
¿No hay ahuyentador de viejos?
A ver, a mí los perros nunca me han dado problemas, y eso que mi ruta habitual de entrenamiento suele transcurrir por una zona donde hay gran cantidad de perros sueltos. Quizás influya que estoy acostumbrado a tratar con animales de más de dos patas.
Pero lo de los viejos es increíble. Recuerdo una en particular que divisé a lo lejos un día viniendo de frente hacia mí. Me fuí situando a la derecha, buscando el hueco para pasar, y me fijé que ella se movía hacia el mismo sitio cortándome el paso. Cambié de lado y lo mismoo. ¡Al final la tuve que hacer un quiebro para no llevármela puesta!
Al final correr se va a convertir en un deporte de riesgo. 😉